Polémica con los coches de las peñas. ¿Pueden circular en tráfico abierto?

En los últimos días, casi todos los palentinos habremos leído o escuchado la polémica suscitada en relación a los coches que utilizan las peñas palentinas en los desfiles de las fiestas de San Antolín, que, por cierto, comienzan este viernes día 30 de Agosto. El motivo, que seis de estos coches no tienen permitida la circulación en tráfico abierto al carecer de ITV, seguro obligatorio y matrícula.

En primer lugar, aclarar que cuando se habla de tráfico abierto se refiere a los trayectos que recorren estos coches desde el lugar en el que están estacionados hasta cualquier otro punto de la ciudad, para lo cual se ven obligados a interactuar con otros vehículos o usuarios de la vía. Fuera de esta definición (y de la polémica) quedan los recorridos que realizan estos vehículos en los propios desfiles de peñas, pues se consideran trayectos en circuito cerrado para los que no es necesario ni ITV, ni seguro, ni matrícula. El problema, por tanto, ocurre durante el trayecto que recorren hasta llegar al punto de salida de los desfiles de peñas, en sus desplazamientos a la Plaza de Toros o a cualquier otro punto de la ciudad, para lo cual deban compartir calzada con el resto de vehículos que circulan por la ciudad.

Por un lado, la policía y autoridades quieren y deben hacer cumplir la normativa de circulación, ya que todos los ciudadanos debemos ser iguales ante la ley, de la misma forma que esos mismos requisitos resultan obligatorios para cualquier propietario de vehículo que quiera circular en tráfico abierto. Por otro lado, estamos hablando de las fiestas y se trata de una situación excepcional, ya que los coches se utilizan de forma puntual y en un entorno controlado y de escaso riesgo, lo que invita a una aplicación más flexible de la normativa.

Muchos de esos coches son antiguos, e incluso su carrocería ha sido modificada, por lo que resulta complicado que pasen con éxito la ITV. El problema, como siempre, de asunción de la responsabilidad en caso de que ocurra algún accidente. Las peñas afirman que nunca ha habido que lamentar ningún accidente, lo que habla muy bien de las medidas que toman para que todo se lleve a cabo con seguridad. Sin embargo, ese hecho no siempre debiera ser válido como justificación, ya que los accidentes pueden suceder en cuestión de segundos y cuando menos se esperan. Por otro lado, a la vista de todo el mundo está el impecable historial de accidentes de los peñistas, lo que debería hacerles merecedores de un voto de confianza por parte de las autoridades.

Las últimas informaciones indican que peñistas y autoridades han podido llegar a un acuerdo que va a permitir sacar los coches a la vez que se cumple con la normativa. Los vehículos se van a estacionar en los depósitos de la policía, y serán escoltados hasta los lugares a donde quieran desplazarlos, como son la Plaza de Toros o la Plaza Mayor, con el objetivo de que se evite lo más posible su interacción con otros vehículos en tráfico abierto. En el caso de los desfiles, al tratarse de circuitos cerrados donde no existe tráfico abierto, no resulta necesario la escolta de la policía.

Esperemos que la solución alcanzada contente tanto a peñistas como a policía y autoridades, y que podamos disfrutar de unas fiestas de San Antolín con la imprescindible animación de las peñas a la vez que se respeta en mayor medida la normativa de circulación.

¡FELIZ SAN ANTOLÍN A TODOS!